martes, 10 de julio de 2012

Jorge Ruffinelli





¨En cada una de sus nuevas películas, Marcos Loayza ha procurado y logrado no repetirse, ni en temas ni en estilo. De todos modos, fiel a sí mismo, a sus valores humanistas, y a sus ideas sociales y políticas, sus películas ven la realidad con el filo invariable y reconocible del análisis agudo. Las bellas durmientes es la primera incursión de Loayza en el género policial, situando el medio social y “mediático” de las modas y las modelos de las pasarelas. En gran medida el humor satírico proviene del contraste entre el glamour de las mujeres jóvenes cuyo destino parece haber sido trazado ante la ausencia de otro futuro que exhibir y vender su belleza, y la actividad policial que dista enteramente de cualquier nivel de eficacia. En ese mundo tan bien observado, Loayza elabora personajes creíbles, algunos vanidosos y otros modestos y de buena fe, mientras desenvuelve las situaciones de la película con observaciones humorísticas, diálogos muy bien resueltos y, como se señala antes, esbozando un grupo humano variado cuya representatividad puede interpretarse como la de los intereses de las diversas clases sociales en la Bolivia actual¨.
Jorge Ruffinelli

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